Es un sitio muy pequeño, distribuido en dos plantas y con apariencia de casita de madera. El mobiliario es variopinto, entre lo improvisado y lo vintage. De fondo suena música de los años 20, y esto por si sólo, ya crea un ambiente especial y único.
Suele haber grupitos de chicas, celebrando despedidas de solteras o cumpleaños, charlando animadas alrededor de todas las sorpresas que aparecen en la mesa. Tiene también un punto romántico si quieres sorprender a alguien. No os asustéis también van chicos y en este lugar se piensa en ellos.
Empieza el brunch con una gran jarra de zumo natural, cosa que se agradece, pues últimamente no hay brunch al que vaya donde no me ofrezcan un zumo de bote o francamente malo, y este no es el caso. A la vez sale una torre de bizcochos, muffins y galletas con café o té al gusto; y un gran plato de frutas de temporada, buenísimas y en su punto. Es verlo y relamerme como un gato.
Después de calentar motores viene el plato central y fuerte, una gran bandeja de embutidos ibéricos, queso y salmón ahumado con una selección de panes. Los embutidos de León y Salamanca están espectaculares. ¡Nos gusta esta alternativa patria a las hamburguesas que ofrecen en otros lugares!
Cuando se acaba el zumo aparece una limonada con toque moruno, muy rica. Como chin pum final una tortilla, a elegir entre la de queso y tomates cherries o la de queso azul, pera y miel, deliciosa y original.
Precio por persona 19 euros, y posiblemente no te acabes todo lo que te ponen.
Como es un sitio pequeño no te olvides reservar con tiempo o inténtalo en Federal Café, otro brunch igualmente recomendable en la zona de Conde Duque.
ARQUIBAR
Travesía del Conde Duque, 5
28015 Madrid - España
Tel.: + 34 915 59 81 48
No hay comentarios:
Publicar un comentario